COMERSE
EL CUENTO CASTRÓFILO
Simpático,
sobre todo, que se hable del "sistema de salud y la educación
cubanos", es decir, castristas, sin haber estado allá. García Márquez vive
en México, no en La Habana ¿se preguntan por qué? Incluso con sus problemas de
Alzheimer incipiente ¿por qué no se va a un país de una medicina "tan
avanzada"? Ah, porque no está tan demente como para creer las mentiras que
él mismo ayudó a propagar. Lo mismo sucede con los castristas de rascacielos
que viven en New York y otras partes de los EE.UU., que vomitan contra el
imperialismo mientras cobran en dólares. Yo fui dirigente medio del PCD y
estuve en Cuba. No hablo de oídas. Allá hasta a uno lo intentan engañar con los
poblados Potemkin. Una médico amigo, dominicana, que estuvo allá me dio
informes más que descriptivos de aquel fiasco mayúsculo. Pero hay un economista
cubano, de la dirección del Estado cubano, que se fue de Cuba y los informes
son más que claros del desastre. ¿Y necesitamos leer a la genial ensayista
cubana Yoani Sánchez para ver el desastre sanitario que padece Cuba, cuyo
sistema de acueducto es de los años 50 y nunca ha sido mejorado en 50 años de
robolución? Educación sin internet ni libertad de discutir ideas ajenas a la
ortodoxia castrista, sin leer a autores prohibidos, sin poder cuestionar ¿A eso
llaman educación? ¿A criar borregos? ¿A castigar el disentir? ¿Pero sabemos qué
significa educación? No ombe. Lo único que podemos decir de la salud cubana es
que Fidel, como tiene a la gente a dieta y dando patas, se asegura de que no
haya una epidemia de obesidad, que sí afecta a la población dominicana
(jejejeje) y de otros países. Ahí sí le reconozco mérito. Pero a qué
precio...!!!!!
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