domingo, 7 de agosto de 2011

LA RESPONSABILIDAD DE PRODUCIR INGRESOS ES TUYA, DE NADIE MÁS


LA RESPONSABILIDAD DE PRODUCIR INGRESOS ES TUYA, DE NADIE MÁS.

La más frugal y sencilla existencia genera costos. Tenemos que adquirir alimentos, vivienda, vestidos; pagar por la electricidad y el transporte; por la educación y la salud. Comprar los muebles y artículos del hogar. Sólo el aire es gratis, pero si lo quieres más puro, menos contaminado, también tiene un precio.

No podemos sustraernos a los gastos, así que estamos obligados a generar ingresos.

Tampoco podemos cargarle a nadie más el cubrir nuestras necesidades. Es irresponsable e injusto.

La madurez psicológica y social se demuestra en parte cuando uno asume la responsabilidad de sí mismo. Y eso incluye como un factor principal cubrir los gastos propios.

Podemos (y debemos) ser frugales y sobrios con nuestro dinero.

Evitar despilfarrarlo. Economizar.

A fin de cuentas, el dinero es la expresión financiera de cuatro factores: el tiempo de vida, los talentos y dones, las destrezas y capacidades adquiridas y el esfuerzo aplicado a una tarea productiva.

La sociedad (es decir, los demás), asignan a nuestro tiempo productivo un valor, según el aprecio que les merece.

Y ese valor se expresa en una cantidad específica de dinero por el cual remuneran nuestros servicios.

Ahora bien, nos alcance lo que nos pagan o no, lo cierto es que es nuestra responsabilidad generar suficientes ingresos para cubrir nuestras necesidades y, por qué no, algunos gustos y aspiraciones.

No podemos delegar esa responsabilidad en el Estado ni en el gobierno de turno. Tampoco en nuestro empleador o en nuestros clientes.

Ni debemos adjudicarla a nuestros padres o a nuestra pareja.

Es nuestra. De nadie más.

De ahí la importancia de que aprendamos a generar ingresos suficientes.

Y ese es el propósito de esta serie. Darte una estrategia que puedes aplicar adicional a cualquier otra, para incrementar tus ingresos.

Del libro digital por Facebook: Cómo incrementar ingresos a partir de cero. Capítulo 3

ESTAMOS LLENOS DE EGRESOS, LO QUE FALTAN SON INGRESOS


ESTAMOS LLENOS DE EGRESOS, LO QUE FALTAN SON INGRESOS

Estamos llenos de gastos que la vida nos obliga a hacer. Tenemos que comer, vestir, morar en una vivienda, tener luz eléctrica, comunicarnos, transportarnos, asearnos, limpiar nuestra casa, lavar nuestra ropa, pagar impuestos, educarnos y educar a nuestros hijos, amoblar el hogar, cubrir gastos médicos, etc.

Y para cubrir esos egresos requerimos ingresos.

Todos gastamos. Y todos tenemos gastos que hacer.

Todos somos consumidores. Y todos necesitamos consumir.

No podemos “No consumir”; esa no es una opción.

Nuestros egresos producen pasivos: costos qué cubrir, compromisos qué solventar.

Poco importa qué tan sobria, austera, limitada, frugal, controlada y espartana quieras llevar tu vida, siempre hay costos básicos e inevitables que hacer.

Vivienda, alimentos, ropa, moblaje, productos para el aseo y la limpieza del hogar, servicios e impuestos son gastos obligados.

Y esos gastos demandan recursos con que cubrirlos. Exigen que produzcamos dinero.

El monto de dinero del que dispongamos determinará el nivel y la calidad de la vida que llevemos.

Y tiene un impacto directo en el grado de satisfacción o felicidad que experimentemos.

El agobio por deudas, la persecución de agentes de cobro compulsivo, la falta de crédito, la precariedad económica, el no poder solventar nuestros gastos son de las causas principales de depresión, divorcio, enfriamiento en las relaciones de pareja, pleitos y enojos en el hogar y desesperación y suicidio humanos.

El dinero no comprará la felicidad, pero la falta de dinero siempre produce infelicidad y dolor, angustia y frustración.

Como personas, sin importar nuestros gustos, nuestra vocación, nuestros talentos y aptitudes, nuestras inclinaciones y preferencias, tenemos que producir el suficiente dinero como para cubrir nuestros gastos y los de nuestra familia, o nos veremos metidos en serios problemas.

Así que, si no podemos desprendernos de nuestros gastos (aunque sí podamos racionalizarnos y reducirlos a lo básico, eliminando aquellos superfluos), es importante que asumamos la responsabilidad de generar suficientes ingresos.

Y que entendamos que esos ingresos tenemos que asegurarlos en el tiempo.

Si tenemos pasivos, es el momento de pensar en cómo obtener activos.

Del libro digital por Facebook: Cómo incrementar ingresos a partir de cero. Capítulo 2

AL FINAL, ¿TIENES O NO DINERO CON QUÉ CUBRIR TUS GASTOS?


AL FINAL, ¿TIENES O NO DINERO CON QUÉ CUBRIR TUS GASTOS?

Por Aquiles Julián

No importa lo que hagas, a lo que te dediques, lo que te guste o prefieras, al final el asunto es si tienes o no suficiente dinero con que cubrir tus gastos.

Todos tenemos gastos, algunos suprimibles, aunque nos causen algunas molestias o nos reduzcan algunos placeres. Otros, por el contrario, inevitables. Y es imposible sobrevivir en la sociedad actual sin los recursos necesarios pues todo, todo, debe adquirirse; por todo debe pagarse.

Alimentos, vivienda, ropa, servicios como la electricidad o el teléfono, medicamentos, atención médica, estudios, productos para la higiene del hogar o la higiene personal, etc., son algunos de los gastos en que normalmente incurrimos.

Y para cubrir esos gastos requerimos producir ingresos.

Así, el estilo y la calidad de nuestra vida queda poderosamente influida por el nivel de recursos de que dispongamos para cubrir nuestros gastos.

Y mucho del tiempo de que disponemos lo dedicamos a producir nuestros medios de vida; es decir, ingresos con los que pagar nuestros gastos.

Sin el dinero suficiente, lo nuestra vida se ve restringida y nuestros gustos o necesidades se ven afectados y limitados, o, peor aún, empezamos a caer por la pendiente peligrosa de las deudas, en que nos vamos entrampando para sostener un nivel de vida para el que no generamos suficientes ingresos.

Y más temprano que tarde entramos en crisis.

Las deudas nos abruman. Nuestro crédito se pierde. Los cobradores y los abogados nos acosan. Y en los hechos quedamos en quiebra.

En el peor de los casos nos embargan e incautan propiedades.

¿Qué podríamos hacer? Si no queremos llegar a esos niveles de desastre financiero, es preciso que nos propongamos desarrollar activos que incrementen nuestros ingresos.

Y de eso precisamente vamos a tratar: de cómo crear un activo que nos genere ingresos, a partir de cero.

Porque, al final, todo se trata de si tenemos o no dinero con qué cubrir nuestros gastos. Y por cuánto tiempo tendremos dinero disponible para ello.

Del libro digital por Facebook: Cómo incrementar ingresos a partir de cero. Capítulo 1