LAS ÚNICAS TRES FORMAS DE GANAR DINERO TRABAJANDO QUE EXPLICAN POR QUÉ TELEXFREE ES UN TIMO

LAS ÚNICAS TRES FORMAS DE GANAR DINERO TRABAJANDO QUE EXPLICAN POR QUÉ TELEXFREE ES UN TIMO

Por Aquiles Julián

Si para algo sirve el escandaloso fraude perpetrado contra más de 200,000 dominicanos por más de US$200 millones de dólares (más de RD$8,000 millones de pesos) por James M. Merrill, Carlos Wanzeler y demás cómplices y testaferros de TELEXFREE es para elevar el nivel de educación financiera de las personas.

¿Es importante la educación financiera? ¡Claro que sí! No importa a qué nos dediquemos, qué nos guste, cuál sea nuestra profesión u oficio, todos los seres humanos que vivimos en sociedad necesitamos resolver  nuestra situación financiera: generar recursos, tener con qué adquirir nuestro sustento y necesidades vitales: vivienda, servicios, ropa, etc.

La escasa o nula educación financiera nos perjudica.

De hecho, los timadores, los profesionales del fraude, los artistas de la estafa (como la pandilla que montó desde TELEXFREE esa monumental pirámide Ponzi de desfraudar), precisamente hacen su agosto con personas carentes de educación financiera, porque no tienen los criterios básicos para proteger su dinero y no dejarse embaucar.

Por ello, vale la pena dar seguimiento al proceso TELEXFREE, ver las maniobras de dilación, confusión y distracción, y constatar la candidez de los timados, que siguen como corderos al matadero a sus victimarios, tragándose los embustes hasta que su caso sea irremediable (el colmo fue el llamado a los estafados para que se “manifiesten” en la Plaza de la Bandera con cartelones respaldando a TELEXFREE. Eso fue ayer, pero no sé si alguien fue tan estúpido de ir en una manifestación del llamado Síndrome de Estocolmo o mejor aún, de ¡Esto es el colmo!).

LAS ÚNICAS TRES FORMAS DE GANAR DINERO TRABAJANDO

Para entender por qué TELEXFREE era una estafa burda, hay que comenzar por entender que sólo hay tres maneras de ganar dinero trabajando.

Sólo tres. No cuatro, ni seis, ni diez. Tres, no más.

No importa qué usted haga, a qué se dedique, de qué viva: si sus ingresos provienen de un trabajo (no de la renta de una propiedad, o de los intereses, etc., sino de un trabajo para sí mismo o para otros), sólo tiene tres maneras de ganarlos.

Y por ahí comienza todo, por entender que sólo hay tres maneras de ganar dinero trabajando.

La primera manera es como empleado.

Un empleado es alguien que, por un salario, vende su tiempo, talento, capacidades, experiencia y esfuerzo a un empleador.

Hay un 65% de las personas económicamente activas que son empleados, trabajan para otros, para un empleador, incluyendo aquellas personas que trabajan para el Estado como empleador: burócratas y empleados públicos, policías, soldados, etc.

Veamos ahora al 35% restantes.

De ese grupo, un 5% integra lo que es el gran capital. El 30% se divide en dos grandes grupos.

Un 28% son propietarios de negocios tradicionales.

Un propietario de negocio tradicional es una persona que usa su tiempo, talento, capacidades, experiencia y esfuerzo en satisfacer necesidades y deseos de una base de clientes a través de la venta de productos y servicios que esos clientes les compran y consumen.

Noten esto: los propietarios (o empresarios tradicionales) venden productos y servicios a unos clientes que les compran y les consumen.

Los propietarios de negocios tradicionales, que pueden ir desde pequeños emprendimientos: talleres, mininegocios, centros de servicio, etc., incluso bajar a las categorías tan sencillas como el dueño de una limpiabotas, una paletera o un motoconchista), hasta colmados, consultorios, bufetes de abogados, tiendas, bares, bancas, restaurantes, farmacias, sastrerías, peluquerías, etc., tienen en común que hacen una inversión de capital para montar la Plataforma de Negocio (local, servicios, surtido, equipos, etc.), tienen que disponer de capital de trabajo para cubrir empleados, servicios e impuestos, además de publicidad para atraer clientes, y tienen que construir una base de clientes suficiente como para que ellos, los empresarios, puedan cubrir costos y obtener utilidades.

Precisamente, debido al hecho de que para montar una Plataforma de Negocio se requiere de un capital y que para operar esa plataforma también se requiere un capital, muchas personas, aunque quisieran ser dueñas de negocio y no empleadas, tienen que emplearse porque no tienen el dinero para invertir.

Los empresarios arriesgan su dinero y por ello, aunque pueden quebrar, también son los que mayor beneficio obtienen cuando triunfan y sus negocios prosperan.

¿Quiénes les permiten triunfar? ¡Los clientes! Son los clientes, al adquirir sus productos y servicios, los que les permiten a los empresarios ganar dinero. No hay otra forma, no hay atajos, no hay fórmulas mágicas.

LA TERCERA MANERA DE GANAR DINERO TRABAJANDO

Si sólo hubiesen dos maneras de ganar dinero trabajando: ser empleado o ser empresario tradicional, para la mayoría de la humanidad, más del 60%, la vida resultaría decepcionante, ya que los salarios suelen apenas permitir sobrevivir, no permiten acumular lo suficiente como para emprender (aunque muchos se sacrifican para ahorrar y poder disponer de un capital de trabajo con el cual montar una pequeña plataforma y cambiar de empleado a dueño de un pequeño negocio, con el sueño de prosperarlo y hacerlo crecer).

Por suerte, existe una tercera manera de ganar dinero trabajando: desarrollar un negocio de la nueva economía o de representación y distribución mediante redes sociales.

En este tercer modelo, la persona comienza a desarrollar educación e inteligencia comercial y financiera, así como habilidades sociales, carácter, inteligencia emocional, propósito y determinación, sin tener que abandonar su empleo o actividad tradicional, capitalizando su tiempo libre para iniciar un ingreso mediante un negocio basado en el apalancamiento en una Plataforma de Negocio suministrada por un socio capitalista, y la creación de una red de consumo y comercialización que representa y distribuya los productos y servicios y a su vez se reproduzca en nuevos afiliados que hagan lo mismo.

¿Qué ventaja tiene esta tercera manera de ganar dinero trabajando? Que no se arriesga capital propio, no hay necesidad de tener dinero para desarrollar un negocio de la nueva economía, salvo una modesta suma para iniciar (y en muchas ocasiones, sólo la decisión y el esfuerzo).

Además, a diferencia del modelo de la economía tradicional, los que incursionan en negocios de la nueva economía cuentan con beneficios como:

1.       Un sistema de educación de negocio espectacular

2.      Una línea de mentores que asesoren y comparten sus experiencias y dan apoyo

3.      Una práctica guiada de aprender a crear clientes, producir ganancia, crear redes y liderar personas.

4.      Un sistema de recompensas financieras y reconocimiento que premia el éxito.

La ventaja es que, mientras se desarrolla como empresario de la nueva economía, desarrolla habilidades comerciales, inteligencia emocional, liderazgo y carácter, así como disciplina y autocontrol financiero, el emprendedor no tiene que abandonar su fuente tradicional de ingresos. Es un aprendizaje que se hace en tiempo libre, paralelo a lo que es su actividad convencional.

Y no tiene los costos fijos y la presión financiera que carga el empresario de la economía tradicional, que asume todos los riesgos de montar y operar una plataforma de negocio y todos los costos conexos.

Los empresarios de la nueva economía, la economía de redes sociales que apenas nace, son un 2% de la población económicamente activa. Su tendencia, sin embargo, es a crecer.

NO HAY CUARTA VÍA DE GANAR DINERO TRABAJANDO

A menos que una persona trabaje para el Estado (burocracia pública), y el dinero de su salario provenga de los servicios que el Estado está supuesto a proporcionar a los ciudadanos por los impuestos que estos pagan, normalmente las personas que son parte de la población económicamente activa o son empleadas, el 65%, o son autoempleadas (pequeños y medianos comerciantes y productores, profesionales independientes, dueños de talleres y técnicos independientes, etc.), el 28%; o son empresarios de la nueva economía, el 2%.

El otro 5% restante lo integran los grandes empresarios con compañías de más de 500 empleados y un sistema de operación, el 4%, y por último hay un 1% de inversionistas, que ponen el dinero a trabajar para ellos.

Pero trabajando sólo hay tres maneras de ganar dinero: 1. Como empleado; 2. Como empresario de la economía tradicional; y 3. Como empresario de la nueva economía.

No hay una cuarta manera de ganar dinero trabajando.

Sólo tres.

Y en todos las tres formas, hay que vender un producto o servicio a un cliente que lo necesita o desea.

Es imposible producir dinero si no hay venta; es decir, si alguien no transfiere un producto o un servicio a cambio de un pago a otra persona.

Aunque un empleado en su tarea por la que le contrataron no venta (por ejemplo, una recepcionista, una conserje, un sereno, un chofer, etc.), son parte de una organización que vive de la venta de productos o servicios, por lo que indirectamente participan de una red de ventas.

Si esa organización vende menos o deja de vender, el puesto de trabajo y el ingreso de ese empleado corren peligro de perderse.

Es imposible querer vivir en el mundo de los negocios y a la vez estar renuente a vender.

Cuando uno no vende, uno se vende a un empleador.

Es imposible no participar en el proceso de venta, porque es imposible no vivir en la economía. Y lo que mueve a la economía es la venta.

¿POR QUÉ TELEXFREE ERA UN TIMO?

Precisamente porque el esquema Ponzi se montó sobre la premisa de que las personas “ganaban dinero por colocar links de anuncios a páginas que se le proporcionaban”.

¿Pero los anuncios no le dejan dinero a las publicitarias? Sí, si un anunciante las contrata y les aprueba una pauta de medios.

Sólo de esa manera.

¿Y para qué un anunciante se anuncia? Por lo general, para incrementar sus ventas, para llegar a más clientes y provocar más pedidos.

Pero TELEXFREE no vendía nada en los hechos. Sus “promotores” no movían productos, sino que afiliaban personas que a su vez afiliaban a otras para colocar unos “anuncios” hueros, porque la compañía en los hechos no vendía: su negocio era la afiliación de personas.

Normalmente, las personas que se implicaban recibían la paga de su propio dinero aportado, pero igual luego se les retribuía si traían a más víctimas.

Aunque los dueños de TELEXFREE alegan que la compañía vendía un servicio de telefonía VoIP (es decir, un servicio similar al de Skype o WhatsApp, que son gratis), en realidad los cuantiosísimos ingresos que recibían no tenían mayor cosa que ver con la venta de ese servicio, sino con las “afiliaciones” de “promotores” dedicados a “poner anuncios”.

No era un negocio porque no vendía nada en los hechos. Era una pirámide Ponzi porque los beneficios se derivaban de enrolar a otras personas que a su vez enrolaban a otras, en un negocio que no estaba registrado en el país (aunque algunos avivatos hasta locales sacaron y hubo uno que lo registró como “una publicitaria”), que no tiene ni un alfiler en nuestro país, que no ofrecía al que se involucrara la más mínima del dinero que metía en el timo, que prometía una rentabilidad imposible de lograr para despertar la codicia y acelerar el fraude, y en donde las utilidades se derivaban no de “colocar anuncios en la Internet” sino de afiliar a más personas que trajeran dinero fresco a la estafa.

Por eso, porque no se basa en la venta, sino en afiliar personas y ganar dinero por afiliarlas, es por lo que TELEXFREE fue, es y será mientras mantenga ese esquema, un timo a todo lo largo y lo ancho.

Sólo hay tres maneras de ganar dinero trabajando: como empleado; como empresario independiente; o como empresario de la nueva economía.

Si alguien alega que se va a ganar dinero “por colocar anuncios en una página”, entonces no se tiene una idea de cómo opera la economía.

El tablazo viene.

Y alguien verá su bolsillo perjudicado.

Lamentablemente, la carencia de educación financiera llevará a todavía más personas a caer en la trampa.

Y luego dirán que fueron artículos como este los responsables de que cerrara esa compañía estafadora.

El no entender que se fue ligero, crédulo, tonto y fácil de abusar hace que muchos preserven su autoestima en base a perder su dinero.

Y ese dinero es mucho, muchísimo.

Esa es la realidad.